Estrategia del Juego: El Crisol
La información kármica de nuestros cuerpos energéticos puede desencadenar enfermedades. Cuando se manifiestan es para que veamos lo que no podiamos ver.
Querida Brinda,
Mi nombre es Daniel, tengo 48 años, casado y con tres hijos, y hace unos días que estoy recibiendo tus mails.
Lamentablemente por una u otra razón no he podido participar de ninguno de tus talleres. Y esto seguramente no va a poder ser hasta dentro de un tiempo.
No se que decirte…..????
Simplemente te cuento que estoy con cancer (primario desconocido con metastasis en los huesos) no se si me puedes ayudar, si me puedes dar algún consejo, si podes hacer algo por mi.
Estoy tratando mi enfermedad con quimioterapia aunque las cosas estan estabilizadas (lamentablemente el tipo de cancer que tengo no tiene cura medica) el dolor es grande y estoy permanentemente tomando drogas (cosa que no me hace muy feliz).
A pesar de todo se puede decir que por ahora sigo con calidad de vida y es por eso que ni bien pueda organizar el viaje a Buenos Aires combinare para hacer un primer taller.
Brinda, no se más que escribirte, pero si te digo que estoy muy abierto a recibir y a realizar lo que se requiera. Tengo una muy buena paz conmigo y soy muy creyente de todo lo que hacen.
Te mando un saludo y aguardo tus comentarios.
GRACIAS,
DANIEL
Sent: Tuesday, April 27, 2004 10:05 PM
Hola querido Daniel:
Hay veces la información kármica que tenemos en nuestros cuerpos energéticos desencadena la enfermedad que hoy padeces junto con muchas otras que todos, TODOS sin excepcion, cargamos en nuestro ser multidimensional lo cual no quiere decir que se manifiesten. Estan en nuestro cuerpo tal como virus encriptados en una pc contaminada pero que no se activaran hasta determinada fecha (relojes biológicos) y que solo la mano de un especialista (Dios) puede retirar.
Cuando la enfermedad se manifiesta es para que «veamos» lo que no «veiamos».
El cancer tal vez sabras es mucha rabia y frustración almacenada en nuestros ciclos kármicos abiertos de los cuales nos rodea gente que en el otro espacio tiempo, estan también con nosotros en el aquí y el ahora. Lo no resuelto, activa en nuestro hoy la manifestación de la enfermedad.
La persona «enferma» no se da cuenta de que «todos estamos enfermos de muerte».
La oportunidad de quien cree saberlo, es hacer algo con ese conocimiento que lo conecta con la búsqueda de lo que olvido.
Quienes estan aun en el periodo de goces son los muertos que desconocen la oportunidad de la Gracia, aun en medio de la enfermedad o del dolor y tal vez, dicen no tener tiempo para ocuparse de otras búsquedas de las que los ocupan en sus vidas diarias. Tal vez vos mismo fuiste uno de ellos y que solo la espada sobre tu cabeza de la supuesta enfermedad desconocida es la que te acerca a la pérdida de lo que todos en este plano perderemos inevitablemente, lo que llamamos vida que no es vida sin Dios en ella.
Tengo certeza de que si uno aprende lo que debe aprender, no por miedo a la muerte sino por aceptación de la oportunidad que ella encierra, renuncia al miedo, a la rabia, que ella trae consigo al ser inferior, muere a las creencias sobre la injusticia de que esa enfermedad le llegue a uno y asciende el aprendizaje al Padre, se libera de la carga y ayuda a su familia porque tiene la Revelación de que Dios Padre los abraza a todos.
El crisol.
El crisol limpia a un grupo de almas por contrato.
¿es lo que debe ocurrir? No necesariamente.
Algunos contratos requieren la materia y se necesita la Revelación de Dios en uno el saberlo tal como le ocurrio al Cristo en el Huerto de Getsemani. Acepto ofrendarse como cordero y ascendio con su entrega al Padre dandonos la oportunidad de liberarnos de la ilusión de la materia.
Asi ocurre con cada enfermo/crisol en una familia o grupo de almas. Limpia en materia lo no procesado o elaborado por el grupo para acercarlos a Dios a través de su enfermedad.
Hace siete años me diagnosticaron un raro tumor de laringe.
Siendo docente de la provincia de Buenos Aires con muchas horas catedra con las que mantenía mi vida «y de paso» me dedicaba a la búsqueda espiritual, esto me movilizo como a cualquiera. En principio, me quedaba sin voz y vivia de ella. Lo primero que hice fue poner todas las cosas en orden desde un punto de vista legal. Luego me aboque a lo que sabia espiritualmente pero que poco atendia en medio de mis tantas obligaciones.
Fue entonces que acepte que si asi debia ser, todo estaba bien.
Renuncie a mi deseo de cambiar nada.
Mori a mis creencias sobre esto que me sorprendia de golpe tal como a vos te sorprendio esta enfermedad.
Y me entregue a la voluntad de Dios.
Me operaron en el Hospital Italiano de Buenos Aires dos veces.
En la primera no pudieron sacar suficiente muestra del tumor como para analizar y me volvieron a operar y esta vez me amputaron la cuerda vocal izquierda y quede con voz de traqueotomia.
En esa época estudiaba Ciencias Sagradas y me aboque a profundizar el conocimiento.
Pedi a la Virgen María recuperar la voz para cantar (porque entre otras cosas soy profesora de Musica) y me puse a hacer una técnica de 40 días para pedir a Dios la manifestación de un poder. La técnica se basaba en alabar a Dios cantando diariamente hasta el agotamiento físico y que un ángel serafin tomaria la garganta en algún momento. Pacte con mi familia el tiempo personal para hacerlo y comence.
Lo curioso es que no tenía voz para hablar y me esforzaba para que salieran a duras penas silbidos que emulaban voz de mi garganta hasta que caia rendida.
Hasta que un día de esos cuarenta, escuche en soledad notas que nunca conscientemente podia repetir. Era la voz de un serafin tomando mi garganta en la lectura de salmos cantados en alabanza a Dios. Tal vez esa fuera la primera vez que conscientemente canalice algo, pero no le llamaba siquiera asi.
La voz que primero me regreso FUE PARA CANTAR.
En ese tiempo tuve el estudio de la biopsia. Diagnosticaron un raro nodulo laringeo. No tumor.
Al tiempo me realizaron otro estudio, la cuerda vocal estaba completa.
Pregunte si se regeneraba como la cola de una lagartija, y me respondieron que no.
Tengo filmaciones que comprueban lo que digo.
Es cuestion de fe.
A partir de allí todo cambio.
Perdi todo lo que en ese momento tenía, inclusive familia.
Pero el Universo hoy me ha devuelto todo con creces pero se que debo seguir soltando, es necesario hacerlo y si la enfermedad es tu Oportunidad de soltar, bendecila y trata de que tu familia comprenda la trascendencia que ella encierra. Si lo hacen, tal vez, uno continue aquí para ayudar a otros a comprenderlo.
Como yo ahora lo hago con vos.
Que el Espíritu nos guíe Siempre
Con Amor Incondicional
Brinda Mair
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