La celebración de Purim representa una tradición milenaria para la comunidad judía, simbolizando unión y perseverancia ante las adversidades. Esta conmemoración anual sirve como recordatorio de la época en que los judíos, enfrentando una amenaza inminente, se unieron para superar un momento crítico de su historia. Fue una época en la que, colectivamente, lograron conjurar el infortunio y triunfar sobre aquellos que se oponían a ellos.
Cuento de la historia de Purim
En los días del reino de Ajashverosh, que se extendía desde la India hasta Etiopía, la ciudad de Shushán vibraba con la vida y la política de un imperio. En este escenario se desarrolla la historia de Purim, narrada en el Libro de Ester, un relato de intriga, valentía y providencia divina.
Ajashverosh, tras despedir a su reina Vashti por desobediencia, buscó una nueva esposa. Mujeres de todo el imperio fueron traídas a palacio, y entre ellas estaba Ester, una joven judía huérfana criada por su primo Mordejai. Ester, con su belleza y gracia, cautivó al rey y fue coronada reina, sin revelar su origen judío.
Mordejai, sentado a las puertas del palacio, escuchó un día una conspiración para asesinar al rey. Informó a Ester, quien a su vez alertó a Ajashverosh en nombre de Mordejai. Los conspiradores fueron colgados, y el acto de lealtad de Mordejai fue registrado en los anales reales.
Sin embargo, la tranquilidad no duraría. Haman, un hombre ambicioso que había sido ascendido a la posición más alta después del rey, exigía que todos se inclinaran ante él. Mordejai se negó a hacer tal reverencia, desatando la ira de Haman. Al descubrir que Mordejai era judío, Haman decidió no solo castigar a Mordejai sino exterminar a todos los judíos del reino.
Haman convenció a Ajashverosh para emitir un decreto que ordenaba la aniquilación de los judíos. La fecha fue elegida por el lanzamiento de suertes, o ‘purim’, y cayó en el día trece del mes de Adar. El decreto fue enviado por todo el imperio, y mientras Haman y Ajashverosh bebían, la ciudad de Shushán quedó perpleja.
Mordejai se vistió de saco y ceniza en señal de luto y clamó en las calles. Ester, perturbada por la noticia, decidió actuar. Aunque ir ante el rey sin ser llamada podía significar la muerte, Ester se presentó ante Ajashverosh, quien, cautivado por ella, extendió su cetro de oro en señal de aceptación.
Ester invitó al rey y a Haman a un banquete donde revelaría su petición. Durante el banquete, Ester pidió que ambos asistieran a otro banquete al día siguiente. Aquella noche, Ajashverosh, sufriendo de insomnio, pidió leer las crónicas del reino y descubrió que Mordejai nunca había sido recompensado por salvar su vida.
Al día siguiente, antes del segundo banquete, Haman fue ordenado a honrar públicamente a Mordejai por sus servicios al rey. Humillado pero obligado, Haman cumplió con el mandato real. Luego, durante el banquete, Ester reveló su origen judío y suplicó por su pueblo. Acusó a Haman de su vileza, y Ajashverosh, furioso, ordenó que Haman fuera colgado en la misma horca que había preparado para Mordejai.
El rey no podía anular el decreto anterior contra los judíos, pero permitió que se emitiera uno nuevo que les daba derecho a defenderse. Los judíos se prepararon y cuando llegó el día trece de Adar, resistieron con éxito los ataques en todo el imperio. En Shushán pidieron un día adicional para defenderse y el rey lo concedió.
La victoria fue celebrada con júbilo. Mordejai estableció la festividad de Purim para conmemorar la salvación del pueblo judío de la aniquilación. Se enviaron cartas a todas las comunidades judías del imperio para que celebraran anualmente con banquetes, alegría y el envío de regalos a los necesitados.
Cómo se recuerda cada año en Purim
Así se recuerda cada año en Purim: con disfraces que recuerdan cómo las apariencias pueden engañar; con la lectura del Libro de Ester; con alimentos y regalos compartidos entre amigos y con caridad para los pobres. Purim se convierte en un testimonio eterno del valor de una mujer y del triunfo sobre la adversidad gracias a la fe y la unidad del pueblo judío.
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